Siguiendo nuestro viaje por tierras de Castilla y por la provincia de Valladolid, no podemos dejar de visitar la gran Medina del Campo, importantísimo núcleo en la historia de Castilla y conquistada a los árbes tiene su origen en la repoblación del siglo XI. Su excelente situación geográfica siempre le sirvió en su devenir histórico.
Esa importancia histórica fue en aumento hasta convertirse en residencia de los reyes de Castilla alcanzando la cumbre de su esplendor merced a Isabel la Católica que pasó en ella los últimos días de su vida.
Destacó sobre todo, por tener durante los siglos XV y XVI las ferias y mercados más importantes de Europa. Era un lugar de grandes negocios en los que fueron relevantes ciertos medios de pago y transacciones que se empezaron a utilizar de otra manera, como las propias letras de cambio. La letra de cambio que tuvo en origen un carácter eminentemente comercial como instrumento mercantil, permitiendo a los mercaderes llevar a cabo operaciones de compraventa de mercancías en distintas ciudades sin los riesgos de transportar dinero en efectivo, su uso se generalizó durante el siglo XV. Pero en el siglo XVI la letra de cambio empezó a perder su carácter de medio de pago en las operaciones comerciales para convertirse en un instrumento puramente financiero,
siendo las ferias el principal centro generador de las operaciones de crédito y
compensación, destacando entre ellas las Ferias Generales de Medina del Campo donde adquirirán un gran desarrollo y donde la letra moderna consolidará su forma definitiva de funcionamiento.
Entre las visitas a destacar y no perderse está el propio Museo de las Ferias, el Palacio Real Testamentario de Isabel la Católica, donde vivió sus últimos días, testó y murió en 1504; y el gran Castillo de la Mota, uno de los castillos más sobresalientes que tenemos en la región y así mismo Castillo de los Reyes Católicos, al que dotaron de modernos sistemas de defensa, usando el ladrillo como principal elemento constructivo, con una torre del homenaje de casi cuarenta metros de altura.
La gran plaza mayor, casas nobles o palacetes como los del Almirante o los Dueñas, son también lugares a visitar, así como la Casa del Peso, el Hospital de Simón Ruiz o las Reales Carnicerías, que es el mercado de abastos más antiguo de España, edificio del siglo XVI, hoy modernizado y con actividad comercial propia. Medina del Campo ofrece a la mirada del viajero una oportunidad de contacto con la historia sustancial de Castilla.